SATHYA SAI ANANDAM
SATHYA SAI ANANDAM: GUÍA DIVINA PARA EL EQUIPO PRAKASHANA MUNDIAL

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lunes, 10 de enero de 2022

GUÍA DIVINA PARA EL EQUIPO PRAKASHANA MUNDIAL




Queridos todos: el día 17 de Diciembre el grupo de traductores de todo el mundo, tuvo un Encuentro vía Zoom con nuestro Sadguru Madusudhan Sai.
Nuestra querida hermana Mercedes Wesley, ha traducido el Satsang. Le agradecemos enormemente esta posibilidad de compartirlo en español.


 

 

GUÍA DIVINA PARA EL EQUIPO PRAKASHANA MUNDIAL 

17 de diciembre de 2021 

Muddenahalli 

 

          Es una gran ocasión encontrarlos a todos al menos en internet, si no en «inner net» (red interna). Sé que su trabajo y su contribución en los últimos dos años, especialmente en estos años de pandemia, han sido tremendos, por lo que, primero y ante todo, Me gustaría transmitirles a todos gratitud en nombre de los muchos devotos y personas que se han beneficiado de los mensajes que les han hecho llegar. Desde todo el mundo, muchos Me han escrito para expresar cuánto valor, confianza y fe han desarrollado, en particular en el último año y medio o dos de pandemia, debido a que pudieron escuchar estos mensajes, ver los videos, recibir las traducciones de muchos de estos discursos y charlas, que los han ayudado inmensamente mientras sus países se hallaban en aislamiento y la gente debía permanecer en su casa. Con tanto pánico, tanto miedo y ansiedad, estos mensajes los han ayudado mucho.   

          En nombre de todos esos devotos que se han beneficiado del seva y los sacrificios de ustedes, quiero transmitir nuestra gratitud colectiva. También quisiera recordar en este momento al Sr. Tigrett. Fue su idea, quizás seis, siete u ocho años atrás, comenzar a compilar todos estos discursos, todo lo que se decía. Con paciencia y de manera incansable, él solía sostener un dispositivo para grabar los discursos, y luego reunía a personas de todo el mundo para que los tradujeran, transcribieran y publicaran, ya sea en internet o en forma de libros. Su contribución al haber iniciado toda esta tarea de grabación y publicación de discursos y charlas es incomparable y, por lo tanto, para él también, nuestro agradecimiento colectivo. 

          Luego, hay una larga lista de personas a las que tengo que trasmitir agradecimiento y gratitud. El siguiente, por supuesto, es el equipo actual de Sai Prakashana, dirigido por Suchetan con la ayuda de muchos de sus capaces compañeros de equipo. Fue para ellos un gran desafío ocupar ese lugar, pero realmente han realizado un gran trabajo. Asumieron el manto de responsabilidad de toda la división de publicaciones y medios, que está trabajando las veinticuatro horas del día, especialmente ahora, durante los tiempos de la pandemia. Ellos trabajaron día y noche para asegurar que cada discurso llegara sin dilación a los devotos, a fin de que todos se beneficiaron mientras el mensaje aún estaba fresco y era relevante para ellos. Todos ellos se han desempeñado muy bien. Trabajaron muy duro aquí en Muddenahalli, mientras los demás equipos situados en diversas partes del mundo contribuyeron desde sus propios países. A todos ellos, un agradecimiento muy, muy grande en nombre de todos los que se beneficiaron y también en Mi nombre.  

          Me encanta transmitir gratitud. De hecho, en algún momento en que Me encontraba en el hospital, nuestro presidente, Sri Srinivas, dijo: «Por favor, háblales, dales un consejo». 

          Yo le respondí que no tengo palabras de consejo, solo tengo palabras para transmitir nuestra gratitud a todos los médicos, las enfermeras y todo el personal del hospital, quienes trabajan con gran denuedo para salvar la vida del hijo de otra persona. Como saben, ellos trabajan muy duro, de modo que solo Me gusta transmitir gratitud. Estoy aquí para transmitir eso. No tengo nada que aconsejarles a todos ustedes, no tengo ninguna instrucción que darles, simplemente quiero transmitir Mi más sincera gratitud y la gratitud en nombre de muchos devotos sin nombre y sin rostro de todo el mundo que se han beneficiado del seva de ustedes. Ésta es una tarea de compasión. Quizás se pregunten por qué es compasión. Es compasión porque éstas son las palabras de Dios que se transmiten a Sus devotos en todos los rincones del mundo, tal como hicieron los Rishis del pasado, quienes pudieron recibir el mensaje de la Divinidad y luego, por compasión, lo pronunciaron en la forma de los Vedas y los Upanishads. Esas palabras que se registraron y preservaron en los Vedas hoy están aquí para que toda la humanidad se beneficie de ellas. Fue por compasión que los Rishis no solo conservaron los mensajes para sí, sino que se los transmitieron a los demás para que todos se beneficiaran de ellos.  

          Comunicar los mensajes a todos alrededor del mundo, en tantos idiomas, es una gran tarea. Veo que incluso los libros Uvacha se han publicado en muchos idiomas diferentes; eso es de gran ayuda. Nunca sabemos qué persona se beneficiará de qué modo al leer incluso una oración de un discurso traducido, o qué fortaleza puede obtener una persona en momentos de prueba.  

          Recibí una gran cantidad de mensajes de devotos, en especial durante los tiempos de la pandemia de Corona, manifestando que leyeron este libro, aquel mensaje o escucharon este discurso y se sintieron felices y fuertes. Su fe en sí mismos y en Dios se rejuveneció y fortaleció. Fueron capaces de enfrentar esos tiempos difíciles con gran confianza en sí mismos y en Dios. Eso ha ayudado a muchas personas. Por lo tanto, éste es un gran seva, es compasión en acción y todos ustedes son parte de ello.  

          Tienen la gran bendición de participar siquiera de alguna manera, como dicen, realizando un trabajo de ardilla en esta gran misión. Cuando Sri Rama estaba construyendo el puente sobre el mar para llegar a Lanka, conquistarla y rescatar a Su esposa, la Madre Sita, no contaba con un ejército profesional altamente calificado ni con tanques o misiles. Ni siquiera tenía un carro de guerra. Él caminó descalzo, a diferencia del rey Ravana, quien tenía todo a su disposición: un poderoso ejército, tanques, misiles, carros, armas, todo. Rama no tenía nada. Solo tenía monos, algunos habitantes tribales del bosque junto con algunos animales, y con ellos construyó el puente y libró la batalla. Había una pequeña ardilla que vio todo el trabajo que estaban realizando estos monos, cargando rocas para construir el puente.  

          La ardilla pensó para sí: «¿Qué puedo hacer por Sri Rama? Yo también quiero participar, pero no soy tan grande ni fuerte como los monos y los osos. Sin embargo, quiero hacer algo».  

          Con esa fe sincera, con ese anhelo «yo quiero hacer algo», esa pequeña ardilla se dirigió al mar, se mojó, rodó sobre la arena para que sus partículas se pegaran a su pelaje y luego fue a sacudirse toda la arena sobre el puente en construcción, en un esfuerzo por allanar el camino, a fin de que los bordes afilados de las piedras no lastimaran los pies de aquellos que cruzaban el puente.  

          La ardilla pensó que lo importante no era el volumen de su contribución, sino su intención detrás de ella: quería hacer algo por el Señor. Puede que no sean los más calificados y los más adecuados, quizás haya personas más inteligentes, más calificadas, más talentosas, pero eso no importa. La intención de hacer el bien a los demás es lo que agrada al Señor. Esa es la razón por la que, incluso hoy, las ardillas tienen tres líneas en el lomo, las marcas que, según dicen, aparecieron cuando el Señor Rama sostuvo a la ardilla en Su mano y le dio una cariñosa palmadita en el lomo. Esas tres líneas son la prueba de que Sri Rama apreció el servicio de esa pequeña ardilla.  

          Hoy, todas las especies de ardillas están bendecidas porque, cada vez que las miramos, recordamos al Señor Rama. Del mismo modo, cada vez que alguien mira estas publicaciones, estos audios y videos ―todo el trabajo que ustedes han llevado a cabo―, no recuerda a un devoto, sino a todo este equipo que está trabajando detrás de escena, para transmitir estos mensajes de Dios a los devotos y a aquellos que perdieron la esperanza.  

          Todos ustedes han realizado una tarea tremenda. Han construido ese puente de comunicación entre Dios y Sus devotos, así como las ardillas y los monos construyeron el puente para que el Señor Rama se encontrara con Su esposa, la Madre Sita. Rama representa a Paramatma, la divinidad, y la Madre Sita representa a prakruti, la naturaleza. Del mismo modo, estos mensajes son líneas de comunicación que conectan a Dios con Sus devotos, la conexión entre purusha y prakruti, lo divino y lo humano, Dios y Sus devotos. Ustedes han construido este Ramasetu, el puente de comunicación entre Dios y Sus devotos, y los han acercado en los tiempos modernos.  

          Ésta es una gran tarea que no puede compararse con otra. Nuestros hospitales pueden parecer muy glamorosos, nuestra misión educativa puede parecer muy gloriosa y alimentar a los pobres puede parecer muy atractivo; pero no muchos reconocen que este trabajo que ustedes están realizando puede producir un impacto en muchos más. Los hospitales pueden ofrecer tratamiento a una cantidad de personas enfermas, pero hay que estar enfermo para recibir tratamiento en el hospital. Las escuelas pueden educar a algunos niños, pero el niño debe estar dispuesto a ir y recibir educación o debe necesitar educación, y debe haber un estómago hambriento para que podamos alimentarlo. Sin embargo, ustedes están poniendo a disposición de todos el conocimiento de Dios.  

          Es necesario que cada uno reciba este tipo de educación espiritual, independientemente de la edad, la condición, el género y la geografía. Todos necesitan un mensaje espiritual, una educación espiritual. Todos necesitan este tratamiento para librarse de la enfermedad de los apegos mundanos, lo que llamamos bhava roga; y, para eso, el mensaje de Dios es la única medicina, la única vacuna. Nada más funciona como tratamiento para esta mundanalidad. Esa es la clase de trabajo que ustedes han realizado. El hambre de conocer la verdad está presente en todos. Ustedes sacian esa hambre dándoles el mensaje de Dios; transmitir mensajes positivos es vuestra tarea. En cierta forma, no solo se han ocupado de la salud mental y el hambre espiritual de las personas, sino también de su educación superior al comunicar los mensajes de manera oportuna, de un modo que todos puedan entender. La gente de todo el mundo habla diversos idiomas y estos mensajes se han traducido y transmitido casi en tiempo real, en muchos idiomas: ese es un gran seva. 

          Una y otra vez, quiero manifestarles que han realizado un trabajo maravilloso. Los últimos dos años han sido difíciles. Sé que todos ustedes querían venir y celebrar el lanzamiento de muchos libros y publicaciones de la forma en que lo hacemos aquí todos los años, pero, por la seguridad de todos, tuvieron que quedarse en sus respectivos países aunque tenían un gran deseo de estar aquí. Yo también tenía muchos deseos de verlos a todos, pero no pudo ser. Sin embargo, pienso que estos años nos han acercado en nuestro corazón más que la proximidad física externa. Ustedes leyeron estos mensajes y fueron los primeros beneficiarios, porque, solo después de haberlos leído y comprendido, los tradujeron y se los pasaron a otros. Por lo tanto, fueron los primeros destinatarios y beneficiarios. Estoy seguro de que todos nos hemos acercado más en nuestro corazón en los últimos dos años debido a esta buena tarea de transmitir, transcribir y traducir los mensajes para beneficio del mundo.   

          Todas las demás tareas pueden permanecer o desaparecer. Se construyeron y destruyeron reinos, se fundaron y también se destruyeron naciones, se ganaron y se perdieron riquezas, las relaciones vendrán y se irán, pero el conocimiento es algo que permanecerá para siempre. Los Vedas perdurarán para siempre; también los pensamientos védicos permanecerán para siempre. A pesar de siglos y siglos de cambio en el mundo, la verdad persiste para siempre. Ustedes han estado trabajando para establecer esta verdad en el mundo, en el corazón y la mente de las personas. Por lo tanto, el trabajo de ustedes seguirá siendo eterno. Aunque todo lo demás pase o cambie, lo que ustedes dejan como legado de pensamiento espiritual y conocimiento de la verdad permanecerá ahí para siempre como un servicio permanente al mundo. Así pues, tienen la bendición de que ésta haya sido su suerte, de que se les haya otorgado esto y de ser los instrumentos elegidos para hacer esta obra asombrosa de Dios en todos los tiempos por venir. 

          Este puente que todos han construido perdurará para siempre. Incluso después de miles de años, la gente aún leerá y escuchará estos mensajes, los comprenderá y se beneficiará de ellos. Son todos mensajes universales sin barreras de religión, casta o geografía. Por consiguiente, son universales para todos. Ese es el tipo de trabajo que han llevado a cabo. Ustedes están acercando a Dios a los seres humanos y a los seres humanos a Dios dentro de sí mismos, y ese es el mejor seva que se puede realizar, especialmente en estos tiempos difíciles.   

Felicitaciones a todos y cada uno de ustedes por haber elegido hacer lo que han hecho y por seguir haciéndolo. Bendiciones y todo lo mejor; que este seva de ustedes permanezca para toda la humanidad, no solo para los devotos de Sathya Sai Baba o los devotos de un lugar o un dios en particular, sino para todas las personas que deseen conocer la verdad, que quieran transitar esta senda espiritual. Estos mensajes y esta tarea de ustedes servirán como luz guía; esa es su bendición. 

Una vez más, quiero transmitirles gratitud en nombre de todos los devotos y también quiero disculparme por la demora en llegar aquí. Llegué diez minutos tarde porque estaba hablando con otro grupo de personas, de modo que todos ustedes tuvieron que esperar. Creo que han esperado dos años, por lo que esperar diez minutos tal vez no haya sido demasiado para ustedes. Aprecio que no solo son de diferentes países, sino también de diferentes zonas horarias, y no es fácil para todos permanecer despiertos en algunas de estas zonas horarias, pero, aun así, esperaron Mi mensaje. Sé lo duro que trabajan y estoy muy, muy agradecido por ello. 

Mucho amor y bendiciones para todos ustedes. Continúen con esta buena tarea; permitan que estos mensajes de la verdad lleguen a todas las personas del mundo. Hasta que este mensaje no llegue a la última persona en la Tierra, en el idioma que esa persona entienda, nuestro trabajo no está terminado. Tenemos que seguir adelante, es un viaje largo pero, aun así, un viaje hermoso. 

Bendiciones para todos ustedes. Gracias al equipo por organizar esta video llamada en tan poco tiempo. Estoy muy, muy feliz. Me gustaría verlos a todos cuando termine esta pandemia y la gente pueda volver a viajar. Espero recibirlos y darles la bienvenida a todos en el ashram de Muddenahalli o iré a encontrarme con todos ustedes cuando viaje a sus respectivos países. Mucho amor y bendiciones para todos ustedes. 

 

 

La visión de la unidad es sabiduría