10. La Entrega
Pueden ganar la gracia del Señor sólo a través de la rectitud. La rectitud induce el espíritu de auto entrega y lo desarrolla.
Sri Sathya Sai Baba
Sathya Sai Baba dice: "Amen mi Incertidumbre". Durante la existencia de este gran Ser, El trató siempre de relacionar a sus discípulos con esta cualidad del Universo Creado, del Juego Divino.
Ciertamente, los participantes de este juego, en este caso, el ser humano, no sabe nada de nada, incluso, no sabe lo que podría pasar en los próximos cinco minutos, por lo general, uno no elige nada en la vida. La pareja, el lugar donde vive, el empleo o negocio, los amigos y si meditas bien, todos estos eventos y encuentros han sido como previamente calculados, es como si una inteligencia invisible guiara nuestros pasos.
No obstante, el mismo Creador del Juego dotó a los participantes de libre albedrío, por lo que siempre será una opción dejarse llevar por esa Inteligencia Invisible o forzar la naturaleza y hacer la voluntad personal.
Cuando el participante quiere imponer sus propias reglas en el juego, produce una desarmonía en todo su alrededor, se sale de las normas del juego, afecta a otros, causa dolor y entonces tiene que intervenir la Ley de la Armonía Universal a restaurar el orden.
No lo olvides, tienes una meta, un objetivo: "marcar un gol", en otras palabras: Amar. Cuando juegas diferente, dañando a otros, por ejemplo, entonces todo se confunde, hay una distorsión en el Universo y la Armonía tiene que intervenir.
Esto es muy importante saberlo, tu objetivo final es Amar, siempre que ames de forma inegoísta, estás jugando el juego perfectamente y mientras más Amor compartas, mejor jugarás el juego y prontamente de seguro te harán capitán de tu equipo, para que puedas guiar a otros a conocer el objetivo del Universo.
No perdamos de vista el tema de la Incertidumbre. Como no sabes lo que va a ocurrir en el futuro, tú le llamas Incertidumbre, pero para la Inteligencia Invisible, que todo lo guía, para el Creador del Juego, todo funciona a la perfección y El sabe perfectamente todo lo que ha de ocurrir.
Si tienes una hija, El sabe con quién tiene que jugar la niña, quién será su pareja, su rol en la sociedad, los estudios que realizará, los lugares que conocerá, esa Inteligencia lo sabe todo y a través de múltiples señales irá conduciendo a la niña al logro de su Dharma, de su Deber en el Universo.
Einstein dijo: "Dios no juega a los dados en el Universo". Si una inteligencia como él dijo esto, entonces debe llamarnos a la reflexión. No hay algo como casualidad en el universo, observa la naturaleza, nada es casual, absolutamente nada, todo está previamente determinado por un funcionalismo.
Sin embargo, la enfermedad de la ignorancia produce que el ser humano piense que puede determinar lo que ha de ocurrir en el futuro y por lo tanto, se afana por forzar las reglas del juego, aunque esto le perjudique grandemente.
El ser humano golpea, hiere, odia, atropella, engaña y de esta forma viola los preceptos del juego, se aparta de su objetivo y el resultado tiene que ser la intervención de la Ley de la Armonía Universal, la cual, a través de mecanismos previamente establecidos, como el dolor y la enfermedad, traerán a ese elemento disociador de nuevo al orden y al respeto a las normas del juego y a pensar en alcanzar su objetivo: Amar.
Ahora bien, ¿cómo podemos conectar con esa Inteligencia Invisible y cumplir la Voluntad del Creador? ¿Cómo podemos dejarnos conducir por esta Inteligencia para siempre permanecer dentro de las normas del juego y nunca sufrir?
Ah, muy fácil, mediante La Entrega.
La Entrega te conecta con la Voluntad de tu Real Ser, entonces la Inteligencia Invisible (la voluntad Divina) guiará tus pasos adecuadamente.
¿Por qué la Entrega funciona de este modo? Simplemente porque cuando te entregas, quitas del medio al egoísmo, a la voluntad unipersonal, y permites que el Inegoísmo, la Voluntad Universal se exprese en tu existencia.
Aprende del Gran Jesús cuando dijo: "Padre... más no se haga mi voluntad, sino la Tuya". El Gran Maestro sabía bien que, aunque le esperaran grandes sufrimientos y tormentos, al final de todo saldría triunfante y su misión en la tierra rendiría grandes frutos, como efectivamente ha sucedido.
Existe una anécdota que me gusta mucho porque ejemplifica magníficamente el tema de la Entrega y es el caso de Pedro, el discípulo de Jesús.
Cuando en Roma estaban echando los cristianos a los leones, Pedro salió huyendo para evitar la muerte, y venía corriendo por los caminos cuando se le apareció Jesús y le pregunto: ¿adónde vas tan rápido Pedro?
Él le respondió: - Señor en Roma están echando a tus discípulos a los leones, así que huyo para evitar la muerte.
Y Jesús le preguntó: - ¿Y dónde están mis discípulos?
- En Roma Señor.
- ¿Y tú hacia dónde vas?
Con esa pregunta de su Señor: "¿Y tú hacia dónde vas?", Pedro entendió que huir era una cobardía y que su Deber era estar con los cristianos en Roma y morir con ellos.
Jesús lo envió a morir, Pedro no se resistió, se entregó a su destino, aunque en el momento no le pareció muy agradable, podríamos asegurar que su decisión fue muy acertada, su entrega a la Voluntad Divina, fue el acto más glorioso que puede realizar un jugador en este Juego Divino. Pedro tendrá por siempre al Creador del Juego a su servicio, con esa entrega ató al Señor a su túnica por siempre.
Cuando una persona practica en su vida la entrega observará que esa inteligencia invisible guía su vida, experimentará que todo lo que le ocurre es para su propio bien y que siempre le ocurre lo mejor.
Algo propio de la enfermedad de la ignorancia es pensar que lo agradable siempre es bueno para la persona y que lo desagradable es negativo. Lo anterior es un grave error. Hay veces en que un evento que se califica como perjudicial, al final del día puede ser grandemente beneficioso.
Sathya Sai Baba nos cuenta:
Un día, Adi Sankara en compañía de sus trece discípulos fueron al río Ganges para darse un baño sagrado, y encontraron a un Brahmín sentado bajo un árbol repitiendo las reglas de la gramática Panini: Dukrunkarane, Dukrunkarane.... Sankara le preguntó qué ganaba él repitiendo los rudimentos de la gramática y el Brahmín respondió que él se convertiría en un gran sabio, se uniría a la corte real y ganaría dinero. Entonces Sankara le preguntó por cuánto tiempo la riqueza le garantizaría la felicidad. El Brahmín respondió que él podría llevar una vida feliz hasta su muerte. Después, Sankara le preguntó al Brahmín qué pasaba después de la muerte y él respondió que no lo sabía. Sankara cantó el poema siguiente:
Bhaja Govinda Bhaja Govindam
Govindam Bhaja Moodamathe
Sampraapthe Sannihithe Kate
Nahi Nahi Rakshati Dukrunkarane
(Oh hombre necio, cuando la hora de tu muerte se acerque, los rudimentos de la gramática no vendrán a tu rescate.
Así que canta el Nombre de Dios) .
Solamente el Nombre de Dios te protegerá a ti en todos los períodos de tiempo y bajo todas las circunstancias. Todo en este mundo es como una nube pasajera y sólo la Bienaventuranza y el Amor son permanentes. El Amor es Dios y Dios es Amor.
Sri Sathya Sai Baba
Divino Discurso — 4 de marzo, 2000.
Un niño que recibe Educación Espiritual Sai Por Rosanna
A continuación presento la historia, narrada por su madre, de Miguel, un niño que, cuando ocurrió este suceso, recibía clases de Educación Espiritual Sai.
Soy Rosanna y en el 2004, junto con Miguel de 10 años, viajamos desde República Dominicana a New York a visitar una hermana que estaba enferma. El vuelo llegó tarde y luego de comunicarme con mi hermana, nos dirigimos a New Jersey. Llegamos al Barrio Chino cerca de las 12:00 de la noche, y como nadie vino a recogernos, nos dirigimos al tren. Por la hora, abordamos el primero que pasó, para no permanecer solos en el andén, con la intención de luego consultar dentro de la cabina la ruta correcta.
Un par de paradas más adelante, nos disponíamos a bajar para hacer transferencia, cuando habiendo salido yo, el tren cerró las puertas con el niño dentro. Al ponerse en marcha, pude ver como el terror de estar perdido en New York a las 1:00 de la madrugada, iba subiendo por el rostro de mi hijo a la misma velocidad con que el tren se alejaba.
Aterrada, pensaba en que mi hijo andaba sin identificación, sin dinero, sin ningún conocimiento de la ciudad, de teléfono o dirección de nadie en los EE.UU., imaginando como podría pedir ayuda en un idioma extranjero, y cuantos peligros reales acechan a cualquier persona en la madrugada de New York.
Corrí tratando de encontrar la salida, y mientras marcaba el número de emergencias, repetía "Swami, Swami, Swami". Afortunadamente había una estación de policía, quienes de inmediato dieron voz de alarma a las próximas paradas y se dispusieron a ubicar un niño hispano de 11/12 años deambulando perdido en las estaciones del tren y/o sus alrededores inmediatos.
El tiempo fue transcurriendo y yo sin idea de cómo podría encontrar a mi hijo en la enorme ciudad, llamaba a Swami; sentía que realmente venía a mi llamado de una forma tan real que de inmediato le decía: "¡No, no vengas aquí Swami, quédate con el niño donde quiera que este!".
Transcurrió el tiempo suficiente para que la policía se preocupara, ya que no lo encontraban en las estaciones, por lo que me ofrecieron acompañarme a mirar por las calles cercanas a cada estación, mientras se daba parte a los organismos de investigación, para la búsqueda de personas desaparecidas.
En medio del llanto, yo repetía el nombre de Swami, y tenía la sensación de que Sai estaba con él. Sin embargo no dejaba de pensar todos los peligros de la gran ciudad.
Llegamos a la próxima estación, y la policía no quiso que yo bajara al andén... fueron a verificar y luego de unos minutos el policía se acercó a un niño sentado tranquilamente en un banquillo y le preguntó " just by any chance... are you Miguel?" (por casualidad, ¿eres tu Miguel?) y justamente era él.
Mi hijo nos contó que al arrancar el tren estaba muy asustado, pero recordó en sus clases de Educación Espiritual Sai una historia en la que Jesús en la playa cargaba una persona en sus peores momentos, por lo que solo había un solo par de huellas en la arena, y pensó que entonces si cuando estas en problema Dios viene personalmente a acompañarte, ¡seguro que estaba al lado suyo en este momento! Esto le dio contento, por el privilegio de tener a Dios a su lado.
Luego hizo memoria de todas las proezas de Ganesha, su poder y su fuerza para eliminar los obstáculos, e invocó a Ganesha. Recordó la historia de Rama y Su valor. Y así fue encontrando el mismo valor en las historias aprendidas en el Centro Sai.
De manera que bajó en la próxima estación, pensó en dar una imagen tranquila, de manera que nadie se acercara a ofrecer ayuda, por si era una persona peligrosa. Para no sentir miedo, angustia o permitir la entrada de pensamientos negativos, se puso a cantar bhajans en su mente. Dijo que asustado, pero con fe total en las proezas que cantan los bhajans, se dispuso a esperar.
Swami cumplió su promesa de cuidar de todos sus devotos. No obstante, tan pronto estuve a salvo con mi hijo, me pregunté si realmente había sido la intervención Divina o simplemente una feliz coincidencia.
La policía nos llevó hasta la estación correcta, y nos indicó donde comprar el ticket hacia nuestro destino final.
Me preguntaba: ¿Cómo saber Swami si has sido Tu o si me estoy fanatizando? En esas cavilaciones estaba mientras caminábamos hacia la ventanilla... y oh! sorpresa: "casualmente" a esa hora de la madrugada la cajera estaba proyectando una película de Swami en la pantalla de su computadora y mientras nos vendía los boletos, vi a Swami sonriente y con sus manos alzadas en señal de bendición.
Om Sai Ram.
Mensaje Sai: Entrega a Dios
Hay muchos que declaran habérseme entregado. Proclaman haberse consagrado íntegramente a Mí. Pero aún siguen con su "yo lo hice", "yo lo siento así", "yo creo que sí", "a mí me gusta", "a mí no me gusta", etc. ¡El yo levanta su caperuza para poder recibir homenaje o alabanzas! Ahora bien, ¡es una gran mentira decir que se han entregado! Es pura falsedad. La palabra entrega es una palabra que se tira sin adjudicarle valor o propósito alguno, para engañar a quienes no han profundizado en su autenticidad. ¿Cómo puedes entregar algo sobre lo que no tienes ningún control? Eres esclavo de tu mente, de tus pasiones, de tus prejuicios; sin embargo, te atreves a declarar que has entregado tu mente, tus pensamientos, tus planes ¡a Dios!
En tanto luchas por escapar de los rollos de la mente y del total dominio de las pasiones, ¿cómo puedes dedicármelas a Mí? No. No necesitas vanagloriarte de tanta valentía, de tanto sacrificio, de tanta devoción. Ni necesito ni pido tal manifestación. Es suficiente si crees que Dios está en todas partes y en todo momento y que no eres diferente de El. Si tú mismo eres Dios, ¿a quién tienes que entregarle nada? Reflexiona profundamente sobre esto y logra la realización.
Sathya Sai Baba
11. La Entrega: Herramienta para la Liberación
La entrega significa no tener expectativas, jamás deberás molestarte si el resultado de los eventos es diferente a lo que tú
has anticipado.
Sri Sathya Sai Baba
Quiero contarte un sueño que experimenté una vez y que me ofreció una perspectiva nueva e interesante acerca del manejo de ciertos elementos mentales desagradables que nos atormentan a todos, me refiero a los pensamientos negativos. A continuación el sueño:
Soñé que en la entrada de mi casa, en una especie de monumento, había un busto con la cara de Sathya Sai Baba en miniatura. Podría decirse que no era exactamente un busto sino la escultura de su rostro.
Estaba contemplando a Swami cuando de pronto se convirtió en un rostro de forma real, es decir, una cabeza que se movía y realizaba los movimientos normales de una cara.
En frente del rostro de Swami había una canastita vacía y El pasó su lengua por la canastita vacía, yo entendí que tenía hambre y que deseaba comer, así que rápidamente fui a la cocina de mi casa a buscar algunas frutas. Tomé una fruta que tenía y coloqué dos trozos en la canastita, colocándolos en frente del rostro del Señor para que comiera.
Entonces, El se transformó de rostro al tamaño normal de una persona, extendió su brazo y tomó de la canastita un trozo de la fruta que yo le había llevado, pero en ese justo momento el trozo de fruto se transformó en una especie de animal alado muy grande, casi del tamaño de una persona. Extrañamente, Swami "engulló" y "absorbió" totalmente aquel animal gigante y cuando terminó de "engullirlo" se transformó en un hermosísimo niño gigante.
Extendió otra vez su mano y de nuevo volvió a tomar el otro trozo de fruta de la canastita, ocurriendo el mismo evento, el trozo de fruta era otro animal, una especie de reptil, el Señor lo "engulló" de nuevo y cuando concluyó, se transformó de nuevo en un niño muy hermoso. Luego de haber "engullido" y "absorbido" estos animales, volvió a transformarse en el rostro que estaba frente a mi casa.
Había muchas personas mirando aquel acontecimiento y todos estaban sorprendidos y muy entusiasmados de convertir aquel lugar en un sitio de adoración.
Fíjate que coloqué la palabra "engullir" siempre en comillas porque el Señor nunca masticó el animal, ni se lo comió, sino que lo absorbió en sí mismo para luego convertirse en un hermoso niño.
En el tiempo que experimenté este maravilloso sueño estaba utilizando mucho el Poder de la Entrega y la interpretación que le doy es que debo ofrecer al Señor aquellas tendencias animales que hay en mí para que El las absorba, de manera que pueda transformarme en un niño inocente, en un niño. Como dijo Jesús: "hasta que no seáis como un niño no podréis entrar en el Reino de los Cielos".
¡Y funciona!
Entrega al Señor todos tus pensamientos negativos, tus vicios, errores, las diabluras más grandes que hayas cometido, no te preocupes, El las absorbe y te transforma.
En este sentido, recuerdo que una vez alguien le dijo a Sathya Sai Baba que tenía un gran problema con el alcohol, no podía prescindir de ese vicio, hasta el punto que se había convertido en un alcohólico. Sai Baba le dijo: "no te preocupes, cada vez que te tomes un trago, dedícamelo a mí". Quizás podemos deducir el final de la historia, aquel hombre terminó abandonando para siempre el vicio del alcohol.
Las personas tienen grandes sentimientos de culpabilidad y cuando cometen un error, no se atreven a acudir a Dios porque temen que serán "juzgados". Lo anterior es pura ignorancia, fruto de la creencia en un Dios castigador que vive en un trono premiando a los buenos y castigando a los malos.
Recuerda, Dios es Ser, Amor, Conciencia y Bienaventuranza, su rol no es juzgar, sino Jugar al Amor, por lo tanto, no temas, entrega todas tus pertenencias mentales al Señor para que El las absorba y te transforme totalmente.
Mensaje Sai: Entrega
La entrega significa la capacidad de alejarte de tus propios pensamientos, pues ellos son el origen de tus preocupaciones, de todas las dificultades que tienes que enfrentar y de todos los diversos problemas que se te presentan.
No guardes nada para Tí. Déjame todo a Mí diciendo: "Señor,
hazte cargo de ellas. Que se haga Tu Voluntad".
Ello equivale a decir: "Gracias Señor, sé que al dejar todo en tus manos, lo que suceda será para Mí el más elevado beneficio".
La entrega significa no tener expectativas, jamás deberás molestarte si el resultado de los eventos es diferente a lo que tú has anticipado.
Cuando estás preocupado demuestras duda y crees que no eres Amado ni Apreciado, olvidas que Yo soy el que está a cargo de tu vida y que nada puede escapar de mi voluntad.
No pienses acerca de lo que sucederá y de cómo las cosas tienen que desarrollarse, si tú cedes a esta clase de debilidad, demuestras que no tienes la suficiente confianza en Mí.
Quieres que Yo me haga cargo de todas tus cosas. ¿No es así? ¡Entonces simplemente debes acabar con todas tus preocupaciones ¡ Podrás encontrar mi Guía sólo si te has entregado completamente a Mí. Y cuando te tenga que llevar por un camino diferente al que tú esperabas, Yo mismo te cargaré en mis brazos.
Tu mente es la causa de todas tus agitaciones, pensamientos, preocupaciones, e incluso el deseo de hacer todo por ti mismo.
¿Qué tan seguido intervengo en tus necesidades espirituales y materiales? Lo hago cada vez que volteas tu mirada en busca de mi ayuda y protección diciendo: "¡Por favor, hazte cargo de esto o aquello!"
Eso es suficiente, después cierra tus ojos y duerme tranquilamente.
Sri Sathya Sai Baba
Escrito en la pared, cerca de la entrada del comedor occidental en Prashanti Nilayam.
Comiencen el día con amor llenen el día con amor, pasen el día con amor, terminen el día con amor, ése es el camino hacia Dios.
Sathya Sai Baba
Jaime Antonio Marizán, MDA